Estonian kringle

 


Este es un pastel típico del norte de Europa, se lo atribuyen diferentes paises como Alemania, Dinamarca etc, es un clásico que se creó en el año 1500 aproximadamente y que se consume en muchas partes de Europa y en Estados Unidos.
Es fácil de hacer y está muy rico.

INGREDIENTES

Para la masa:
30 g de azúcar glas
125 g de leche
30 g de mantequilla a temperatura ambiente
1 cucharada de levadura de panadería granulada
1 yema de huevo
300 g de harina de fuerza
Una pizca de sal

Para el relleno:
50 g de mantequilla a temperatura ambiente
60 g de azúcar 
2 cucharadas de canela molida
Frutos secos variados (nueces, avellanas, pasas) etc

Para la glasa muerta:
100 g de azúcar glas
20 g de agua
Unas gotas de esencia de vainilla

PREPARACIÓN
de la masa:

1. Empezamos a preparar la masa, echando en un bol el azúcar glas, la leche templada y la mantequilla, mezclar todo bien con unas varillas, incorporar la yema, la harina, la levadura y la sal y vamos formando una masa blandita, amasamos sobre una superficie enharinada, una vez amasada formamos una bola y la dejamos que doble su volumen en un recipiente tapado con film transparente en un lugar templado durante una hora o hasta que doble su tamaño.

Para el relleno:
2. En un bol ponemos la mantequilla en trocitos a temperatura ambiente, las cucharadas de canela y el azúcar e integramos bien estos ingredientes.
3. Machacamos los frutos secos y las pasas ligeramente.
4. Cuando la masa haya doblado su volumen la extendemos con un rodillo en una superficie enharinada hasta formar un rectángulo de 40 por 50 cm aproximadamente.
5. Pincelamos el rectángulo de masa con la masa de canela por toda la superficie, y le añadimos los frutos secos troceados bien repartido por todo el rectángulo de masa.
6. Vamos enrollado la masa por la parte más ancha hasta formar un cilindro, con un cuchillo bien afilado cortamos a lo largo hasta dejar 2 cm del borde para que quede unido por ahí y vamos formando una especie de trenza procurando dejar hacia arriba la parte estriada para que se vea al hornearse, unimos los extremos  sellando con unas gotas de agua, dejamos que vuelva a fermentar en la misma bandeja en la que vamos a llevarlo al horno habiendo colocado previamente sobre la bandeja papel de horno.
7. Precalentar el horno a 180° con calor arriba y abajo, cuando esté caliente el horno y la masa haya vuelto a fermentar, meter al horno entre 15 y 20 minutos dependiendo de cada horno.
8. Mientras tanto vamos preparando la glasa muerta, en un bol mezclamos despacio el azúcar glas con el agua y la esencia de vainilla, con ella pincelamos toda la superficie de la trenza justo recien salida del horno y dejamos enfriar.
Espero que os guste.

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